El amianto azul es la variedad de asbesto más tóxica junto al amianto marrón. La crocidolita dejó de utilizarse en España en la década de 1970 por su poca resistencia y por su toxicidad. Asimismo, aún hay edificios que contienen amianto azul por los usos que se le daba, ya que tenía diferentes aplicaciones como aislante de paredes, revestimiento de tejado, en los suelos y en las cañerías. Además, se utilizaba en productos químicos industriales y domésticos.
Qué es el amianto azul
El amianto azul o crocidolita es una variedad de amianto compuesta por microfibras finas y muy afiladas. Al ser tan finas sus fibras hacen que se rompan con mayor facilidad, por lo que pueden entrar en suspensión en el aire e intoxicarte si inhalas el polvo de amianto que hay en el aire.
Características del mineral crocidolita
El amianto era principalmente utilizado en la construcción porque era un material muy resistente al fuego. En el caso del amianto azul, no aguantaba tan bien las altas temperaturas, por lo que, no cumplía con las expectativas de protección, por lo que se utilizaba el asbesto hasta el 2002 en España.
Una de las principales características del amianto azul es que es la variedad más tóxica de asbesto, ya que sus fibras son mucho más finas y afiladas, por lo que es mucho más fácil que se rompan y entren en suspensión en el aire. Inhalar el polvo del amianto azul puede hacer que desarrolles diferentes enfermedades, entre las que se encuentran la asbestosis, el cáncer de pulmón, el cáncer de laringe, el mesotelioma maligno o la fibrosis pulmonar, entre otras enfermedades relacionadas con la exposición al asbesto azul. Al ser un material tan quebradizo y tóxico cuando se rompe, desde 1970 se empezó a eliminar la crocidolita de manera progresiva, pero a día de hoy, aún se encuentra presente en muchas estructuras antiguas.
Qué tipo de dureza tiene el amianto azul
El amianto azul es un tipo de asbesto que está compuesto por silicatos que contienen hierro y sodio. La dureza que tiene el amianto azul permitía que se utilizará tanto en productos industriales como domésticos. Es tipo de asbesto se le reconoce por tener un calor azul muy característico y por el ancho de sus fibras que son delgadas, es decir, tienen un ancho de entre de 20 a 60 milímetros de ancho.
Cuáles han sido las aplicaciones de la crocidolita
La crocidolita, además de utilizarse en productos industriales, también se utilizaba en la construcción, pero en menor medida. Puedes encontrar amianto azul en el revestimiento de tu tejado, en tus cañerías, en tus paredes o en el aislante de las paredes de tu vivienda.
Aislante en paredes
A pesar de que no fuera la variedad de amianto que resistía más calor, la crocidolita se utilizaba como aislante en paredes porque era un material resistente tanto a los ácidos como a los álcalis.
Revestimiento de tejados
El amianto permitía que los tejados fueran impermeables y resistentes a los rayos ultravioleta. Por ello, se utilizaba en el revestimiento de los tejados para alargar su vida útil.
Cañerías
El amianto azul era resistente a los cambios bruscos de temperatura. Por eso mismo, una de las principales aplicaciones del amianto azul era en las cañerías de las viviendas y de los edificios industriales, porque permitía que no se congelaran las tuberías.
Paredes y suelos
Al ser un material tan económico, el amianto azul se utilizaba tanto en las paredes como en los suelos cuando se construía una casa antes de conocer todos los riesgos que implicaba para la salud la utilización de este tipo de material.