El amianto, también conocido como asbesto, fue una vez un material ampliamente utilizado en la construcción debido a sus propiedades resistentes al calor, la electricidad y la corrosión. Sin embargo, a lo largo de los años, se ha descubierto que presenta graves riesgos para la salud y el medio ambiente.
En este artículo, te explicamos en detalle por qué retirar el amianto es esencial, especialmente si vives o trabajas en estructuras que lo contienen.
¿Cuándo es obligatorio retirar el amianto?
Desde el año 2002, la Unión Europea prohibió la utilización del asbesto en nuevos productos y edificaciones. En España, no es obligatorio retirar el amianto inmediatamente de todas las estructuras, pero sí es mandatorio hacerlo cuando estas estructuras están siendo reformadas, demolidas, o cuando el amianto se encuentra en mal estado y puede liberar fibras al aire.
Razones para eliminar el amianto
El amianto o asbesto, por mucho tiempo, ha sido una pieza fundamental en la construcción debido a sus múltiples beneficios, como resistencia al fuego y aislamiento térmico. Sin embargo, con el tiempo, los estudios han demostrado que las consecuencias negativas de este material superan ampliamente sus beneficios.
En este punto te vamos a mostrar tres de las principales razones para considerar seriamente la eliminación del amianto de cualquier estructura o edificación.
Enfermedades causadas por el asbesto
El peligro más importante y urgente asociado con el amianto es el riesgo para la salud. La exposición continua a fibras de amianto puede tener efectos catastróficos, como por ejemplo:
- Asbestosis. Esta enfermedad pulmonar crónica se produce después de una inhalación prolongada de fibras de amianto. Los síntomas incluyen dificultad para respirar y tos persistente, y en casos graves puede llevar a insuficiencia cardíaca.
- Mesotelioma. Es un cáncer agresivo y raro que afecta el revestimiento de los pulmones, el corazón o el abdomen. Está directamente relacionado con la exposición al amianto y, lamentablemente, tiene un pronóstico muy desfavorable.
- Cáncer de pulmón y laringe. Aunque el tabaquismo es la principal causa del cáncer de pulmón, la exposición al amianto multiplica el riesgo, especialmente en personas fumadoras.
Riesgo para el medio ambiente
El amianto no solo representa un riesgo para la salud humana sino también para el medio ambiente en el que vivimos:
- Contaminación del aire. El amianto en descomposición o dañado puede liberar fibras microscópicas al aire, que pueden ser inhaladas por seres humanos y animales.
- Contaminación del suelo y agua. Las fibras de amianto pueden filtrarse en el suelo y contaminar fuentes de agua subterránea, lo que afecta no solo a la flora y fauna sino también a comunidades enteras que dependen de esa fuente de agua.
¿Te gustaría saber más sobre este tema? No te pierdas nuestro artículo sobre el impacto ambiental del asbesto.
Multas y sanciones
Más allá de los riesgos de salud y medioambientales, hay consecuencias legales y financieras por no manejar adecuadamente el amianto:
- Regulaciones estrictas. En Madrid y en toda España, hay regulaciones estrictas en cuanto al manejo, disposición y eliminación del amianto. Ignorar o violar estas regulaciones puede llevar a graves consecuencias legales.
- Sanciones económicas. Las multas por no cumplir con las regulaciones de amianto pueden ser considerables. Además, las empresas o individuos pueden enfrentar demandas si se demuestra que su negligencia llevó a la exposición al amianto y, como resultado, a problemas de salud.
Beneficios de retirar el amianto
Aunque el proceso de eliminación del amianto pueda parecer complicado o costoso inicialmente, las ventajas a largo plazo son significativas y compensan con creces cualquier inversión inicial. Aparte de la tranquilidad que brinda saber que tu espacio es seguro, hay beneficios tangibles que a menudo se pasan por alto.
Mejora de la calidad del aire interior
La calidad del aire que respiramos en interiores es esencial para nuestra salud y bienestar general. A menudo, no somos conscientes de las partículas y contaminantes presentes en el aire que nos rodea.
En este sentido, eliminar el amianto tiene los siguientes puntos positivos:
- Reducción la liberación de fibras. El amianto deteriorado o dañado puede liberar fibras al ambiente. Al retirarlo, previenes la emisión de estas fibras peligrosas.
- Prevención de enfermedades respiratorias. Al mejorar la calidad del aire, reduces el riesgo de enfermedades respiratorias asociadas con la inhalación de fibras de asbesto.
- Promoción de un entorno más seguro. Un espacio libre de amianto es sin duda más saludable para sus ocupantes, reduciendo el riesgo de enfermedades a largo plazo.
Aumento del valor de la propiedad
La presencia de amianto puede ser un punto de disuasión para posibles compradores o inquilinos. Por lo tanto, eliminar este material potencialmente peligroso también tiene claros beneficios económicos:
- Mayor atractivo para compradores. Las propiedades certificadas como libres de amianto son más atractivas en el mercado, ya que los posibles compradores ven valor en no tener que afrontar ellos mismos el proceso de retirada.
- Reducción de futuros costes legales. Al prevenir posibles litigios relacionados con enfermedades causadas por el amianto, ahorras en potenciales costes legales y de salud.
- Cumplimiento de la normativa. Al estar al día con las regulaciones locales y nacionales sobre el amianto, evitas posibles multas y sanciones.
Contribución a la salud pública y el medio ambiente
La retirada del amianto no solo beneficia a los propietarios e inquilinos de un edificio, sino a la comunidad en general:
- Protección de la salud pública. Al eliminar el amianto, reducimos la carga global de enfermedades relacionadas con la exposición a este material.
- Reducción de contaminación ambiental. El amianto puede liberar fibras al medio ambiente, afectando al suelo, al agua y al aire. Su eliminación contribuye a la conservación y protección del medio ambiente.
- Responsabilidad social. Demostrar una actitud proactiva y responsable frente a este problema refuerza la imagen positiva de propietarios y empresas ante la sociedad.
¿Quién puede retirar el amianto?
La retirada de amianto no es un trabajo para aficionados. Requiere de profesionales capacitados y certificados que conozcan los riesgos asociados y las medidas de seguridad necesarias.
Nosotros, como empresa especializada en la retirada de amianto en Madrid, contamos con el equipo y la experiencia necesarios para llevar a cabo esta tarea de forma segura y eficiente.
Querer quitarlo uno mismo no solo es un peligro para la salud pública, sino que corres el riesgo de incurrir a cuantiosas multas por retirar amianto sin estar autorizado.
¿Qué se hace con el amianto retirado?
Una vez eliminado, el amianto debe ser desechado de forma segura. Para ello se transporta a vertederos especializados donde se almacena de manera que no pueda liberar fibras al ambiente. Es esencial asegurarse de que este proceso se realice correctamente para evitar futuros problemas medioambientales y de salud.