El aspecto del amianto no resulta tan importante como solemos creer a la hora de identificarlo. Y la causa de esto reside en el hecho de que el amianto siempre aparece en los inmuebles como parte del fibrocemento, el cual se encuentra conformado mayoritariamente por cemento. En cualquier caso, no existe un único tipo de amianto, sino seis variedades diferentes, cada una de ellas con una morfología y un color específico. En este nuevo artículo vamos a hablar de estas para que tengas una idea más aproximada.
Aspecto del amianto
El amianto, también llamado asbesto en ocasiones, es una categoría de minerales metamórficos fibroso que se componen de silicatos. Entre sus variedades encontramos, en primer lugar, el crisolito, también conocido como amianto blanco. Este presenta, además de ese característica color níveo, unas fibras muy delgadas, de gran flexibilidad y con una marcada curvatura. Ha sido una de las variedades de amianto más utilizadas a lo largo del siglo XX hasta su prohibición en el año 2002 en nuestro país.
A continuación encontramos la amosita, conocida popularmente como amianto marrón. Es la variedad que se empleó más comúnmente para la fabricación de láminas de cemento y para los aislamientos térmicos. En cuanto al aspecto del amianto marrón, encontramos que contiene fibras rectas y muy largas. Por su parte, la crocidolita o amianto azul posee fibras rectas, largas y finas de un color claramente azulado. Todas las variedades son tóxicas, pero esa especialmente. ¿Seguimos adelante?
De qué color es el amianto
Hasta el momento hemos visto tres colores de amianto diferentes: blanco, marrón y azul. Pero restan aún en la lista tres variedades más. Por un lado la tromilita, conocida como amianto gris por el color de sus fibras, y la actinolita, la cual no tiene un color bien definido. Las presentamos juntas porque son amiantos que jamás fueron utilizados de manera comercial. Por otro lado, la antofilita, llamada amianto amarillo, muy empleada en productos de aislamiento y en materiales de construcción.
Cuánto pesa el amianto
El peso de los minerales se mide en peso específico o densidad relativa. Esta consiste en la relación entre su peso y el peso de un volumen igual de agua a 4ºC. Así, y dado que el amianto tiene un peso específico de 2,4-3,3, hablamos de que una muestra del mismo pesa de 2,4 veces más a 3,3 veces más de lo que pesaría un volumen igual de agua. Ahora que ya sabes cuánto pesa el amianto, pasemos a otra características muy importante del mismo: su dureza. Acompáñanos un poquito más.
Dureza del amianto
Para calcular la dureza de los minerales debeemos utilizar la escala de Mohs, una escala numérica que va de 1 a 10, siendo el 10 el material más duro que existe: el diamante. En ese sentido, la dureza del amianto se halla en el 5,5, lo que nos habla de una dureza moderada. En cualquier caso, estas informaciones son claves para saciar la curiosidad, pero no sirven de mucho para identificar el amianto en una tubería o en un tejado. En cuanto sospeches de un material, no lo toques y contacta con nosotros.
Vida útil del amianto
La vida útil del amianto se sitúa en aproximadamente treinta años. Es entonces cuando las micropartículas de amianto comienzan a desprenderse del cemento dentro del fibrocemento y empiezan a pasar al aire, con lo cual se convierten en un peligro para la salud humana. Conocer la vida útil del amianto es importante, ya que la normativa vigente obliga a retirar el polvo de amianto cuando la alcanza. Ahora conoces qué aspecto tiene. Si quieres conocer cómo se produce el amianto, pásate a leer este otro post.