Disponemos de varios métodos diferentes para reconocer el amianto: conocer la fecha de instalación de las placas de fibrocemento, consultar la documentación o a la empresa fabricante, buscar una inscripción en las mismas y, por último y la más precisa de todas, tomar una muestra del material y enviarlo al laboratorio. En este artículo acerca de cómo saber si tengo amianto en casa vamos a profundizar en estos métodos. Al fin y al cabo, y como ya vimos anteriormente, respirar amianto es muy peligroso.
Pautas para reconocer el amianto
La primera alternativa, tal como ya hemos señalado, es descubrir la fecha de instalación de la placa. Y es que la comercialización y utilización del amianto fueron prohibidas en el año 2002. Eso significa que una placa instalada después de ese momento estará libre de amianto. Por el contrario, las placas fabricas antes tienen muchas probabilidades de contener amianto. Después de todo, las empresas constructoras abusaron mucho de este material mientras era legal por sus propiedades aislantes y resistentes.
En segundo lugar, y ya sea porque desconocemos la fecha de instalación o porque hemos descubierto que se sitúa con anterioridad al 2002 y necesitamos tener más información para saber si la uralita tiene amianto o no, podemos consultar a la empresa constructora o a la documentación aportada por esta en su día. A veces es complicado porque la documentación se ha perdido o la empresa constructora ya no existe. Pero es una alternativa que conviene explorar. Podría sacarnos de duda de inmediato.
Cómo saber si una tubería tiene amianto
¿Cómo saber si una tubería tiene amianto? Tenemos la tercera opción ante nosotros: buscar en la tubería, la bajante o cualquier otra estructura de la que sospechemos alguna inscripción. Esto nos sirve para descartar, ya que las nuevas placas de uralita sin amianto incluyen una inscripción que pone “NT”, siglas del concepto “Nueva Tecnología”, que sirve para diferenciarlas de las placas de uralita con amianto. Si estas siglas no aparecen, debemos seguir sospechando del material. No debemos dejarlo estar.
Test de amianto
Y la única solución que queda ahora para estar tranquilos es el análisis químico. Es muy importante que no tomes ninguna muestra del material. Y no solo porque el amianto es cancerígeno y estarías poniendo en un serio peligro tu salud, sino también porque es ilegal. Solos los especialistas que conformamos las empresas inscritas en el RERA tenemos legitimidad para tomar muestras y enviarlas a los laboratorios químicos. En ese sentido, te recomendamos contactar con nosotros cuanto antes.
Materiales que suelen contienen amianto
Entre los materiales que suelen tener amianto encontramos tuberías, cañerías, bajantes, depósitos de agua, suelos, techos, tejados, paredes, maquinaria pesada y muchos otros más. Por suerte, en la actualidad existen alternativas de uralita sin amianto fabricadas con todo tipo de materiales inofensivos para la salud humana: plásticos, metales o vidrios. Es fundamental intervenir rápidamente los materiales que contienen amianto si queremos protegernos de sus micropartículas biopersistentes y tóxicas.
¿El cemento lleva amianto?
Una de las preguntas más habituales en torno a ese peligroso mineral es si el cemento lleva amianto. Y, para que quede claro definitivamente, la respuesta es no. La confusión viene de que la uralita es un fibrocemento. Es decir una combinación de cemento con fibras. Pero el problema en esa mezcla no reside en el cemento. El problema reside en las fibras de amianto, que terminan desprendiéndose del cemento y pasando a formar parte del ambiente, lo que representa una amenaza para la salud de todas las personas.